Renting, una buena alternativa para optimizar cualquier negocio

Poner en marcha un negocio o incluso intentar optimizarlo es sinónimo de realizar ciertas inversiones que en algunos casos puede suponer que el proyecto que tanta ilusión nos hace se vea paralizado porque no contamos con el capital suficiente, o simplemente tenemos que reducir gastos y por lo tanto, no conseguiríamos exactamente aquello que tanto hemos soñado. Existen estrategias y métodos para negocios que pueden ser una salida más que factible a ciertos problemas, como, por ejemplo, el renting. Si no sabes de qué se trata, en este artículo te lo explicamos.

¿Qué es el renting?

Cuando hablamos del renting nos referimos a un contrato que se realiza entre dos partes. La primera de ellas es la que presta el servicio, siendo habitualmente una empresa, mientras que la segunda es un cliente, pudiendo ser en este caso una persona particular o incluso, como estamos hablando en este artículo, otra empresa o negocio. De entre todos los que existen, el más conocido, como también el más extendido es el de los coches, aportando muchos beneficios a aquellos que llegan a contratar este servicio, algo que te explicaremos más adelante.

Beneficios del renting

El renting tiene muchas ventajas frente a otros tipos de contratos y ayuda a ahorrar mucho dinero en un negocio. Siguiendo con el ejemplo anterior, cuando una persona alquila un vehículo en renting, lo que está haciendo es pagar una cuota que es fija todos los meses, algo que para muchos es lo ideal, ya que no tienes que estar pensando si dicha cuota va a subir o bajar. Pero, por otro lado, tienes la ventaja de que, al realizar un renting disfrutarás de todos y cada uno de los servicios y prestaciones que se pueden agregar al coche, desde el seguro, para poder utilizarlo al momento, como también cualquier gasto de mantenimiento, ITV o incluso los impuestos. Todo esto se paga en una única cuota, haciendo que el empresario pueda olvidarse de todo lo demás, usando su vehículo para el trabajo por el que ha sido contratado.

Tipos de renting para negocios

Existen en el mercado actual muchos tipos de renting que una empresa puede adoptar, siendo, como hemos explicado, el de coches el más habitual, ya que puede ser contratado no solo para tener un vehículo de turismo, sino también para la contratación o alquiler de furgonetas u otros coches industriales durante un periodo de tiempo.

Otro de los más comunes es el renting inmobiliario, el cual lo que se hace es alquilar un local, oficina o gran superficie, como una nave industrial durante un tiempo al que se deberá de llegar a un acuerdo en el contrato inicial. Por lo general, ya que se trata de un contrato para la puesta a punto de un negocio y con pensamiento de que este va a durar durante muchos años, se suele estipular un tiempo comprendido entre los 10 y los 20 años, y en este caso, todo el mantenimiento y también la luz, agua y todo lo que se vaya a utilizar dentro de esa oficina corre por cuenta del cliente.

Un renting que no es muy conocido, pero que a día de hoy también está ganando más adeptos tanto a nivel particular como empresarial es el renting tecnológico o de equipamiento. Esto lo que hace es que una empresa alquila todo el material que necesita otra empresa, ya sean ordenadores, mobiliario, o cualquier otro elemento que sea necesario para el comienzo y funcionamiento de tu negocio. Al igual que con los anteriores, este contrato cuenta con un tiempo de duración, y en según qué casos, también un mantenimiento para que siempre puedas disfrutar de equipamiento en buenas condiciones.